BMW i8, la otra cara del futuro

Hoy mismo os hablaba del hermano menor de los modelos que BMW está sacando al mercado a modo de «concept car», y que van a tener muchísima repercusión en el mercado de los próximos años. Ahora toca pasar revista al hermano mayor, el BMW i8, que será perfecto para los que deseen ampliar lo que ya de por sí trae incorporado el BMW i3, y de paso mejorar el compromiso con el medio ambiente que asumen al hacerse con este coche.

El BMW i8, de mayor tamaño y por tanto de más potencia, tiene un total de 260 CV, una cifra inaudita si consideramos que se trata de un coche eléctrico. Su gran problema, si tiene alguno, es el hecho de que la autonomía que tiene lo convierte en poco útil para largos desplazamientos, ya que dispone de 35 minutos gracias a sus recursos eléctricos, a lo que hay que añadir una hora y cuarenta y cinco minutos más de tiempo que aporta su batería de combustible de hidrógeno. Así pues, se trata igualmente de un híbrido espectacular, de líneas futuristas y gama muy alta, con unos acabados propio de los modelos de gama más alta de la marca BMW.

Lo mejor del modelo BMW i8 es el hecho de que, mientras utiliza las baterías de combustible de hidrógeno, sus niveles de emisiones son prácticamente inexistentes. Por supuesto, y como se trata de un «concept car», sólo algunos privilegiados podrán llegar a conducir una de estas maravillas. Pero está bien saber que en BMW trabajan por los vehículos ecológicos.

Foto: iGerard