Tal y como declara la Universidad de Massachusetts, en Estados Unidos, «Galicia es un ejemplo a nivel mundial gracias a su programa de energía eólica». Y es que si a veces la comunidad autónoma nos da algún que otro disgusto por la mala gestión de sus residuos, lo cierto es que hay que reconocer el éxito alcanzado por sus molinos de viento.
Aunque en España no todos los puntos pueden sacar el mismo partido a las energías renovables, yo soy de los que piensan que todos podemos participar en mayor o menor medida de una vida más sostenible, formando parte del que ya se considera como un nuevo modelo social, y demostrar que realmente estamos implicados a un nivel profundo con las energías «verdes». Sin embargo, y tal y como ya señalaba en anteriores ocasiones en el blog, son las universidades extranjeras las que señalan el crecimiento de nuestro país en cuestiones de medio ambiente, pero nuestras propias universidades siguen sin gozar del prestigio y el reconocimiento nacional que, por sus proyectos como éste, merecerían.
Lo más destacable de este caso, sin duda, es que varias compañías gallegas han enviado especialistas desde Vigo a Estados Unidos para dirigir varios proyectos relacionados con la implementación de la energía eólica en dicho país, con lo que podemos decir que cada vez tenemos más «franquicias» por el mundo, que mandan el mensaje de compromiso con un nuevo modelo empresarial al resto del mundo desde España.
Foto: Franga