Subvenciones de última hora, que llegan desde Extremadura y que tienen un ligero aroma a demagogia, pero que nunca están de más. Así es como podríamos calificar a la impresionante partida económica que el Gobierno de España confirmaba en el día de hoy para la comunidad autónoma, y que supone más que probablemente el último empujón que le dan al sector de las energías renovables antes de dar el carpetazo definitivo a su mandato.
Las ayudas se enmarcan dentro del Plan de Energías Renovables de Extremadura, donde se va a buscar potenciar los negocios y las infraestructuras relacionadas con las energías limpias que se encuentran en la región, y que intentará incentivar que los emprendedores y potenciales inversores se animen a ver Extremadura como una opción interesante a la hora de instalar paneles fotovoltaicos. Aunque es pronto para predecir el impacto que tendrá esto sobre los nuevos negocios de energías renovables que se abrirán paso en la región, la realidad es que a las asociaciones de empresarios de las energías renovables de España les ha sentado bien ver que, al final del camino y con tanta crisis, todavía hay tiempo para invertir en renovables.
Sin embargo, hay una duda que nadie ha explicado y que estaría bien aclarar: si estas subvenciones son aprobadas por este Gobierno, ¿está garantizado que se mantengan en la próxima legislatura? Lo digo porque nadie dice que la tijera posterior al 20 – N no vaya a cortar también por este sitio, ¿no?
Foto: Has